Con singular composición dedicada al vibráfono, instrumento de percusión similar al xilófono, la Orquesta Sinfónica de Yucatán interpretará los días 12 y 14 de mayo el Concierto para Vibráfono del compositor mexicano Héctor Infanzón, además de la Petite Suite del francés Claude Debussy y la Sinfonía en Re menor del belga César Franck. En el reinicio de su temporada 2023, la OSY incluirá en su repertorio dicha música escrita para el vibráfono, con la ejecución a cargo, en calidad de solista, del percusionista internacional Ricardo Gallardo, en sendas presentaciones bajo la batuta del director artístico, José Areán, este viernes a las 20:00 horas y domingo a las 12:00 horas en el Palacio de la Música.
El Concierto para Vibráfono y Orquesta “Jugando con papá” de Héctor Infanzón, estrenada en 2016 con la Orquesta Filarmónica de la UNAM en la Ciudad de México, suscita interés ante los convencionalismos de los conciertos generalmente dedicados al violín, el violonchelo, el piano, la guitarra o algunos de los alientos metales y maderas. Como parte del nuevo modelo de gestión de la OSY, mediante la Secretaría de la Cultura y las Artes se da impulso a los artistas nacionales, dado que el autor de la partitura y el solista son mexicanos, que alternan en el programa con creaciones de compositores clásico europeos.
“Está el concierto para vibráfono, primer instrumento, entre muchos, que había en la casa y que cuando llegó nos encantó a todos y, mientras mi papá nos enseñaba, nosotros jugábamos a su alrededor. Y así se llama el concierto: Jugando con papá”, rememoró el compositor en torno de su obra de inspiración familiar. La composición, dijo Infanzón, forma parte de un conjunto de creaciones, junto con el Concierto para Violín y Orquesta “Remembranzas” y el Concierto para Piano y Orquesta “Celebración”, titulado Tres Historias Concertantes, cuyo contenido son evocaciones e impresiones de la infancia en su natal Ciudad de México.
Además de arreglista y productor, Héctor Infanzón (1959) es ejecutante del piano, el vibráfono, la batería y la guitarra. Ha incursionado en otros géneros como el jazz, la música afrocaribeña y la mexicana, rock progresivo, pop y música clásica y se ha desempeñado también como solista con orquestas nacionales y extranjeras. A su vez, el percusionista Ricardo Gallardo fue alumno del Conservatorio Nacional de Música y de la Escuela Nacional de Música de la UNAM, The Banff Centre of Fine Arts en Canadá y The City University, en Londres, Inglaterra, donde culminó sus estudios con grado de Maestría. Es reconocido por su trayectoria como intérprete y director del famoso conjunto Tambuco. Además de múltiples presentaciones como solista con orquestas nacionales y extranjeras, es ganador, entre otras distinciones, de la Medalla Mozart de Oro en grado de excelencia, otorgada por la Embajada de Austria y el Instituto Cultural Domecq.
La parte inicial del programa corresponderá a la presentación de la Petite Suite o Pequeña Suite, un conjunto de piezas para piano a cuatro manos compuesta entre 1886 y 1889 e interpretada por primera vez el 02 de febrero de 1889 por el propio compositor y el pianista Jacques Durand en un salón del Conservatorio de París, donde fue muy bien recibida. La música de Debussy captura perfectamente un estado de ánimo de serenidad y languidez en el agua, abriendo con una especie de suspiro musical que hizo que la Petite Suite se hiciera inmediatamente popular entre un amplio público. Un alumno del autor, Henri Busser, creó una versión de la suite para orquesta 18 años después, lo que el compositor calificó como “ingeniosa”. Hoy en día, es una de las obras más interpretadas de Debussy, tanto en su forma original como en los numerosos arreglos.
La OSY cerrará con broche de oro el programa con la interpretación de la Sinfonía en Re menor, la obra orquestal más famosa y la única sinfonía del compositor belga César Franck, quien la creó entre 1886 y 1888 y la estrenó en el Conservatorio de París el 17 de febrero de 1889, un año antes de su muerte. La obra de Franck, que representó su pase a la inmortalidad, es considerada el punto de contacto entre dos diferentes tradiciones musicales: la forma cíclica francesa y la forma romántica alemana, con amplias influencias de Wagner y Liszt.
La Sinfonía en Re menor consta de tres tiempos, de vastas proporciones, cada uno formado de dos partes simétricas enlazadas por un desenvolvimiento. En lugar de superponer estas partes se suceden una a la otra, asegurando entre ellas unidad. Después del primer movimiento, en el segundo resalta el corno inglés con una cantinela, especie de balada, impregnada de profunda melancolía sobre un tenue ritmo de cuerdas y arpa para luego dar paso a figuras rítmicas con carácter de scherzo. Una amplia coda, de tierna e íntima expresión, cierra poéticamente esta bella página sinfónica.
Los boletos están disponibles (300 pesos) en la taquilla de la OSY ubicada en el lobby del Palacio de la Música o a través de la página web www.sinfonicadeyucatan.com.mx
