El Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), en coordinación con el Museo Nacional de Arte (Munal), invitan al público a conocer la colección de libros identificados con marcas de fuego que resguarda la biblioteca del recinto. La bibliotecaria Diana Pérez Barrera explicó que en la sección del Fondo Reservado se encuentran libros con marcas de fuego que son un signo claro de pertenencia y son representadas por iniciales o letras colocadas principalmente en los cantos de los libros mediante un instrumento metálico candente. La mayoría son símbolos, anagramas o monogramas, incluso leyendas o nombres.
Indicó que, a la fecha, las marcas de fuego se valoran como un testimonio histórico definitivo que permite identificar a las instituciones y particulares que se valieron de ellas como evidencia de haber sido los poseedores de ciertas colecciones bibliográficas, como serían el Seminario Conciliar de la Ciudad de México, el Convento de San Diego de la Ciudad de México, entre otras instituciones. Su uso se hizo extensivo en el siglo XVII para evitar el robo de ejemplares y especificar su pertenencia.
De forma cuidadosa y con guantes para la manipulación de las ediciones, la bibliotecaria Diana Pérez muestra algunos de los libros y comenta que el Fondo Reservado cuenta con dos de los ejemplares más antiguos, los cuales poseen algunas otras marcas de pertenencia que también narran su procedencia e historia. El Fondo Reservado del Munal alberga una colección de libros antiguos que van desde 1541 —que sería el libro más antiguo con el que cuenta la biblioteca— hasta publicaciones de 1800.
Diana Pérez explicó que el Fondo Reservado cuenta con alrededor de 800 ejemplares y desde su punto de vista es importante resaltar el proceso del libro antiguo, los cuales fueron realizados de forma manual, tanto el empastado como el papel y las marcas de filigranas que se realizaron en oro y plata. Algunos tienen cantos entintados en dorado, marmoleados o con grabado. Dentro de las visitas guiadas que brinda el recinto los martes y jueves a las 12:00 h, se realiza una muestra de los ejemplares del Fondo Reservado de la biblioteca. El único requisito para conocer esta colección es que acudan con guantes y cubrebocas por la manipulación del material y para la seguridad de los asistentes.
Algunos ejemplos de estas joyas bibliográficas son: el libro Index omniom diui Hieronymi lucubrationum, in duas sectus partes… cui accesserunt autoritatum a Diuo Hieronymo explicatarum, item Scholiorum Erasmi, cum nomium Hebraicorum & Graecorum interpretatione, índices. Publicado en 1546, autor: Jerónimo, Santo (ca. 345-420), cuenta con una encuadernación de pergamino flojo; es de la orden religiosa de los jesuitas y tiene marca de fuego, la procedencia de la marca es Real y la más antigua de San Ildefonso de la Ciudad de México. Está formada por la abreviatura S. de Santo y las iniciales ILD, abreviatura de Ildefonso, inscritas en un rectángulo formado de líneas onduladas.
El libro Ritual Carmelitano de los Religiosos y Religiosas D. la Orden D. Descalzos de NA. Madre SSA. La Virgen María del Monte Carmelo de la primitiva observancia, en esta congregación de España e Indias, corregido, ilustrado y aumentado según el Misal y Ritual Roms y la antigua costumbre de la orden, publicado en 1789, autor: Carmelitas Descalzos, es un libro de canto, rimas, tonos, entonaciones, prácticas de canto, misas e instrucciones para las notas musicales. Su encuadernación es pergamino sobre cartón, la anteportada es un Frontispicio calcográfico arquitectónico fechado en 1788. Tiene portada a una tinta con exlibris manuscrito del Colegio de San Joaquín con texto a renglón seguido, reclamos en recto y verso y marca de agua en ambas guardas.
Su marca de fuego es de la orden religiosa de los carmelitas descalzos, la procedencia de la marca es del Colegio de San Joaquín (Tacuba, Ciudad de México). Su Variación sobre las armas de la Orden del Monte Carmelo. Un mantel sumado de una cruz potenzada, cargado de una estrella y flanqueada la cruz de las letras capitales S y J. Al timbre, corona real abierta.
La bibliotecaria indicó que los libros siempre nos han acompañado y es importante que la gente los consulte, no solamente por la antigüedad que poseen, sino que también cuentan con características específicas, por ejemplo, algunos pueden tener el mismo título, pero por dentro tiene algunas particularidades, ya que no es lo mismo decir que estuvieron en resguardo de un seminario conciliar o de una orden religiosa.
Diana Pérez Barrera es licenciada en Biblioteconomía y licenciada en Políticas y Proyectos Sociales. Se ha desempeñado como bibliotecaria en el Instituto Nacional de Antropología e Historia y en el Nacional Monte de Piedad; además participó en un proyecto en el archivo histórico de la misma institución. También ha participado en proyectos de libros antiguos para conservación y difusión. Actualmente se desempeña como coordinadora de la biblioteca del Museo Nacional de Arte.
El Fondo reservado y la colección general de la biblioteca del Munal abre de lunes a viernes de 10:00 a 17:00 h; Tacuba 8, colonia Centro. Horario de servicio, de martes a domingo de 10:00 a 18:00.