Como parte del vigésimo aniversario de actividades profesionales, la Orquesta Sinfónica de Yucatán contará este fin de semana con grandes talentos de la música: la connotada violinista Shari Mason y el director huésped Iván López Reynoso en la presentación del Concierto No. 1 para Violín de Prokofiev y obras de Lara y Schumann. Se trata del tercer programa de la 41 temporada de conciertos, con el cual la sinfónica consolida y amplía su repertorio con obras inéditas en Mérida de compositores nacionales e internacionales clásicos y contemporáneos, a dos décadas de su primera presentación pública ocurrida el 27 de febrero de 2004.
Los días viernes 23 y domingo 25 de febrero a las 20 y 12 horas, respectivamente, la OSY presentará en su sede, el auditorio del Palacio de la Música, su programa de aniversario que incluirá La Víspera, obra de la distinguida compositora mexicana Ana Lara (1959) y la Sinfonía No. 4 del alemán Robert Schumann (1810-1856). Excepcional será el concierto de aniversario de la orquesta por su contenido y artistas invitados, coincidieron en señalar en rueda de prensa la concertista, así como la presidente del Patronato de la OSY, Margarita Molina Zaldívar, el director general del Fideicomiso Garante de la Orquesta Sinfónica de Yucatán (Figarosy), Miguel Escobedo Novelo, y el director huésped.
Shari Mason egresó de la Escuela Nacional de Música de la UNAM y la Jacobs School of Music de la Universidad de Indiana. Siendo tan solo una niña de nueve años, recibió en 1993 el premio a “mejor intérprete de violín a nivel nacional” del concurso Hermilo Novelo. Tuvo cursos de especialización con los reconocidos maestros Natalia Batyeskava, Pinchas Zuckerman y Joshua Bell. Es concertina de las orquestas Sinfónica de Minería (desde 2013) y Sinfónica Nacional, ha sido solista con la Filarmónica de la UNAM, Sinfónica de Aguascalientes y Sinfónica de Yucatán y ha tocado bajo la batuta de directores como Zuohuang Chen, Lior Shambadal y Antoni Ros-Marbá.
Su repertorio incluye el Concierto para dos violines y cuerdas, Moz-Art á la Haydn de Alfred Schnittke y los conciertos para violín y orquesta de Brahms, Beethoven, Sibelius y Glazunov, entre otros. En 2012 grabó todas las obras de cámara para violín de José Pablo Moncayo en una edición discográfica especial que publicó la Secretaría de Cultura de México.
El joven maestro López Reynoso es destacado director de orquesta y de ópera mexicano. Tomó clases magistrales con Jean Paul Penin, Jan Latham-Koenig y Avi Ostrowsky. A sus 34 años de edad, dispone de un repertorio operístico de más de 40 títulos. Ha dirigido en EU, Omán, Suiza, España, Italia, Alemania y Perú y trabajado con artistas de la talla de Brigitte Fassbaender, Ildar Abdrazakov, Javier Camarena, Ute Lemper y Ramón Vargas.
La OSY abrirá el tercer programa con la interpretación de La Víspera para orquesta, una obra de apenas 15 minutos, pero intensa, con un enfoque renovador, creada en 1989 por “la muy contemporánea y ultra innovadora” mexicana Ana Lara (según Joe Aimone, crítico musical del periódico “Olivet” de Michigan). “Para mí el sonido no es una línea sino un cuerpo esférico y como tal tiene un centro y ese centro es el corazón, el corazón del sonido al cual hay que llegar. Ésta es mi búsqueda actual”, afirmó la autora Ana Lara, cuya obra abarca desde la música para instrumentos solistas, de cámara, sinfónica y coral hasta música coreográfica y teatral.
La siguiente pieza del programa, el Concierto No. 1 para Violín del ruso Prokofiev (1891 – 1953), tuvo su estreno con orquesta el 18 de octubre de 1923 en la Ópera de París con Marcel Darrieux en la parte solista y Serge Koussevitzky en el podio, seis años después de haber sido compuesto en tiempos de la convulsa Revolución de Octubre de Rusia. Entre el público se encontraban miembros de la élite artística del París de principios de los años 20, como Pablo Picasso, Alexander Benois, Anna Pavlova, Karol Szymanowski, Arthur Rubinstein, Joseph Szigeti y Nadia Boulanger. A cien años del recital, se ha convertido en una de las obras más populares del compositor y del repertorio para violín
Antes, en cuestión de meses tuvo éxito, como consecuencia del estreno en Rusia sin orquesta, interpretado por el violinista Nathan Milstein y el pianista Vladimir Horowitz, y la posterior interpretación de la versión completa por Szigeti y una orquesta dirigida por Fritz Reiner en el Festival de Música Contemporánea de Praga de 1924. El concierto de tres movimientos causó controversia, ya que los progresistas opinaron que era demasiado conservador y los conservadores demasiado progresista: el primer y tercer movimiento evocan al romanticismo del siglo XIX y el segundo a los ritmos primigenios del siglo XX. Igor Stravinski, quien no gustaba de la música de Prokófiev, cambió de opinión con este concierto.
La OSY cerrará su presentación con la Sinfonía No 4 Opus 120, que constituye la cúspide de la obra sinfónica de Schumann, misma que fue estrenada a fines de 1841 en el famoso Gewandhaus de Leipzig, Alemania. De cuatro tiempos o movimientos sin pausa entre ellos, la sinfonía tiene reminiscencias beethovenianas. La introducción es de acusada melancolía, el tema principal es un arabesco. Hay animación y frescuras juveniles, un fugato. Recuperada la quietud, pronto se impondrá lo tumultuoso para concluir la obra con júbilo y conocidos moldes italiano.
Considerada la versión original como “más ligera y transparente en su textura”, la Cuarta Sinfonía de 1841 se sigue interpretando en ocasiones y existen grabaciones de la misma, aunque la revisada de 1853 se ha impuesto por méritos propios y es la que goza del mayor favor de público y críticos. La OSY tiene disponibles boletos en la recepción del Palacio de la Música (350 pesos) o bien se pueden adquirir en línea mediante la página web www.sinfonicadeyucatan.com.mx
