La diversión también es parte de la música, de ahí que la Orquesta Sinfónica de Yucatán anuncie la presentación para este fin de semana de dos obras maestras de la farsa: la Obertura “El barbero de Sevilla” del italiano Gioachino Rossini y Máscaras de Bergamasque, pieza de la comedia del arte francés del siglo XVIII de Gabriel Fauré. El maestro Juan Carlos Lomónaco dirigirá desde el podio este excepcional programa que incluirá también la Sinfonía No. 8 en Fa mayor, Op. 93, joya del compositor Ludwig van Beethoven, los días cuatro y seis de febrero a las 20:00 y 12:00 horas, respectivamente, en el Teatro Peón Contreras.
Tras la exitosa Gala de inicio de Temporada de “Oberturas y Valses”, la OSY busca mantener al público cautivo, esta vez, con las ya mencionadas obras basadas en jocosas y divertidas puestas en escena. El Fideicomiso Garante de la OSY y la administración del teatro han dispuesto la aplicación de las medidas sanitarias de prevención para el Covid-19, designadas por las autoridades de salud, a fin de que los visitantes y músicos puedan contar con una estancia segura.
De la famosa ópera bufa, El barbero de Sevilla, basada en la comedia del mismo nombre (1775) de Pierre-Augustin de Beaumarchais y estrenada el 20 de febrero de 1816 en Roma, el compositor italiano, Gioachino Rossini, legó esta excepcional obertura que evoca el contenido de esta divertida comedia de enredos. La ópera bufa trata de las peripecias de una pareja de enamorados integrada por el conde de Almaviva y la joven huérfana Rosina, a quien Bartolo, preceptor de la muchacha, también pretende pese a la diferencia de edad. Para evitarlo, la pareja recurre a la ayuda del barbero Fígaro, quien mediante enredos engaña a Bartolo y consigue unir en matrimonio a los enamorados.
El barbero de Sevilla de Rossini (1792-1868) fue una de las primeras óperas italianas que se representaron en los Estados Unidos, ya que fue estrenada en el Park Theatre de Nueva York el 29 de noviembre de 1825. A más de dos siglos de su primera representación, es la novena ópera más vista en la historia del género, muy aceptada por sus tres famosas arias: Largo al factotum, Una voce poco fa y La calunnia. Por su carácter alegre, chispeante y humorístico, la obertura se toca con frecuencia como pieza de concierto y recrea musicalmente los enredos de la trama. En 1938 fue llevada a la pantalla grande y forma parte de la banda sonora de un sinnúmero de series de TV, anuncios, dibujos animados y películas.
Del francés Gabriel Fauré (1845–1924), Máscaras de Bergamasque, Op. 112 representa un homenaje del siglo XX al mundo de las fiestas galantes del siglo XVIII y se escucha como suite (conjunto de danzas) orquestal desde su estreno en Montecarlo el 10 de abril de 1919. Se ideó como un divertimento en un acto, cantado y bailado con escenografía de René Fauchois inspirada por Paul Verlaine, en el que se relata cómo los miembros de la troupe de la commedia dell’arte espiaban los encuentros amorosos de los aristócratas y su audiencia. El título refiere a una bergamasca, una danza popular de Bérgamo, Italia. Tiene su origen en la línea inicial del poema de Verlaine cantado en el sexto movimiento: “Votre âme est un paysage choisi / Que vont charmant masques et bergamasques”.
Con broche de oro, la OSY cerrará su segundo programa con la Sinfonía No. 8 en Fa mayor, un portento musical beethoveniano, de ritmo exaltado y dionisiaco, perfecto en el concepto de la instrumentación, del ritmo y del estilo melódico, conforme la opinión del compositor francés Héctor Berlioz, quien quedó fascinado por la obra. En esos raros periodos de felicidad de su atormentada existencia, Beethoven (1770-1824) realizó los primeros bocetos de la Sinfonía No. 8 a fines de 1811 y la terminó en octubre de 1812 conjuntamente con la Sinfonía No. 7, a la cual le une el íntimo parentesco de su alegría, bienestar y divina inspiración.
El estreno de la Sinfonía No. 8 en Fa mayor, Op. 93 ocurrió el 27 de febrero de 1814 y en sus cuatro movimientos se advierte una gran fuerza expresiva, pasajes alegres y vivos, y una delicadeza de líneas elegantes y melódicas que son un aviso del gran advenimiento en la historia de la música: la Novena Sinfonía en Re menor, Op. 125. Los boletos para disfrutar de este concierto ya están disponibles en las taquillas del Teatro Peón Contreras (100, 200, 250 y 300 pesos) o bien puede adquirirlos a través de la página web www.sinfonicadeyucatan.com.mx